
Barras de calabaza cremosas con un ligero sabor a coco y un toque de nueces pecanas. No es necesario utilizar una batidora de alta velocidad, y tienen la consistencia perfecta recién sacadas del frigorífico.
Endulzadas maravillosamente con leche condensada de avena cremosa Nature’s Charm, que también aporta una gran textura final.
Tiempo de preparación: 20 minutos
Porciones: 9
Ingredientes
Para la base
150 g de nueces pecanas (tostadas si se desea para una mayor intensidad de sabor)
50 g de avena molida / harina de avena
2 cucharadas de linaza molida
½ cucharadita de canela
60 g de aceite de coco derretido
40 ml de leche condensada de avena Nature's Charm
Relleno / Capa superior
200 g de puré de calabaza
80 g de leche condensada de avena Nature's Charm
60 g de aceite de coco derretido
60 g de mantequilla de coco derretida
80 g de mantequilla de anacardo suave o mantequilla de almendras
½ cucharadita de canela
¼ de cucharadita de jengibre molido
Una pizca de nuez moscada
Nueces pecanas para decorar
Instrucciones
Triture las nueces pecanas en una bolsa de alimentos con un rodillo o colóquelas en un procesador de alimentos.
Mezcla la harina de avena, las nueces, el lino molido y la canela en un tazón. Agrega la leche condensada de avena y el aceite de coco derretido.
Coloca la mezcla en un molde para pan forrado y engrasado. Extiende uniformemente con el dorso de una cuchara. Coloca en el refrigerador durante 30 minutos para que se endurezca.
Agrega todos los ingredientes del relleno a una jarra o tazón. Usa una licuadora de mano para combinar; también puedes hacerlo en una licuadora si lo prefieres.
Vierte esta mezcla sobre la base establecida. Coloca las nueces encima; ten en cuenta dónde quieres cortar las barras.
Deja que se asiente por completo en el refrigerador durante la noche, o al menos durante cuatro horas.
Retira del molde, corta y sirve. Guárdalo en el refrigerador hasta por una semana o congélalo hasta por un mes.